12/06/2009

6 de Diciembre, un día que recuerda que solo la lucha nos garantiza el mañana.


Son 475 años de la curiosa fundación de San Francisco de Quito, fundación hecha en otra ciudad y que luego se daría sobre las cenizas dejadas por los aborígenes como muestra de resistencia. Su cultura sería arrasada, menospreciada, humillada. Los verdugos serían elevados en monumentos y otras formas de engrandecer el crimen atroz que cometieron.

Recordar el 6 de Diciembre, es recordar una lucha llevada por la dignidad, con orgullo y contra la opresión, una lucha que se extendió desde aquella fecha y que derivaría en la actual sociedad de clases, una lucha que sigue siendo la misma: combatir a los tiranos por el Socialismo y la Libertad.

Los anarquistas revolucionarios llamamos a recordar el 6 de Diciembre no en la algarabía alienante o fiestas alternativas pagadas con fondos estatales o de la Unión Europea, llamamos a recordar y a mostrar a nuestra clase que luchar por nuestra vida, por nuestros derechos, por nuestra historia, es luchar por la Revolución Social. Solo nuestra clase, ubicada en el campo, la ciudad, la fábrica, la oficina, el barrio, el centro de estudio, será capaz de clavar la espada en el pecho del monstruo llamado Capitalismo, y que ahora se hace llamar “Socialismo del Siglo XXI”.

Nuestro objetivo, como clase, como revolucionarios es rescatar esa llama eterna de rebeldía, de arrojo hacia las ideas que los explotados defendemos, que caracterizó la resistencia de nuestros ancestros. Nuestra promesa es que esa llamada jamás se extinguirá, sino que avivará entre el pueblo, y se convertirá en una inmensa hoguera que extermine a los tiranos.

¡El 6 de Diciembre empezó 1534 la desgracia del pueblo quiteño y de la región!

¡El 6 de Diciembre de 1534 empezó la lucha heroica del pueblo contra un nuevo enemigo!

¡Honor y Gloria a los héroes de la resistencia quiteña!

¡Luchar, Unir y Vencer!